Con la llegada del verano, sus vacaciones y los días interminables, se nos presenta la ocasión perfecta para disfrutar de nuestra ciudad durante el mayor tiempo posible y una de las mejores maneras de hacerlo es sobre ¡dos ruedas!
Dar o no dar pedales, esa es la cuestión. Para nosotros la disyuntiva tiene una fácil respuesta: ¡por supuesto! No solo se trata de que la práctica del ejercicio de la bicicleta sea buena para la salud pero, para quienes aún no lo sepan, os contaremos que montar en bici supone un magnífico ejercicio cardiovascular que fortalece nuestro corazón, al mismo tiempo que reducimos el colesterol y el riesgo de infarto. Ojo con estos datos: sólo 10 minutos de pedaleo ya repercuten en la musculatura, el riego sanguíneo y las articulaciones; a partir de 30 minutos aparecen influencias positivas en las funciones del corazón y a partir de 50 minutos se estimula el metabolismo graso; por si fuera poco, durante el ejercicio el cerebro se oxigena más y permite pensar con más facilidad, además, el cuerpo segrega hormonas que nos hacen sentir mejor, las endorfinas, por lo que la bicicleta se transforma en un excelente antidepresivo natural. Si a estas bondades para la salud añadimos que se trata de un medio de transporte cien por cien ecológico y gratuito, no nos quedan muchos argumentos para no ponernos a dar pedales!
Todo esto podría no servir de mucho si viviésemos en un lugar difícil para el uso de la bicicleta, una ciudad con grandes desniveles, excesivo tráfico o climatología adversa podrían desmotivarnos a la hora de lanzarnos a las dos ruedas, pero Gijón es un sitio ideal para su práctica: una ciudad fundamentalmente llana, no excesivamente grande y por tanto asequible en distancias y con un volumen de tráfico más que aceptable, con una meteorología suave durante la mayor parte del año (vale, si, ya sabemos que alguna que otra vez nos llueve un poco, jeje) y, sobre todo, con una importante red de carril-bici, hacen de nuestra ciudad el mejor lugar de Asturias para la práctica del ciclismo urbano.
Desde que, hace unos años, se apostase por la habilitación de carriles bici en la ciudad, los kilómetros practicables han ido aumentando cada año. En la actualidad son unos 60 km entre las calles y avenidas del casco urbano y sendas verdes (que se pueden consultar en este plano-guía) como la de La Camocha, la del Peñafrancia, la del parque fluvial del Piles o la del río Ñora, donde la bicicleta comparte transito con otros usuarios. Además, la posibilidad de utilizar una bicicleta pública de manera gratuita es otro de los alicientes que nos animan a recorrer la ciudad dando pedales. Actualmente existen 8 estaciones repartidas por diferentes puntos del casco urbano (Poniente, Plaza del Parchís, Avenida de la Constitución -zona de los institutos-, Cuatro Caminos , Avenida de Schulz -esquina a la Calle Valencia-, Calle Avelino González -junto al Centro Municipal Integrado de El Coto-, Parque de la Fábrica del Gas y Calle Palacio Valdés -frente a la estación de FEVE-RENFE-), con 64 bicicletas disponibles para su uso entre las 8:30h y las 21:00h en horario de verano. Para hacer uso de estas bicis solo necesitamos contar con la tarjeta ciudadana.
Gijón es, además, una ciudad donde la cultura de la bici cada vez tiene más presencia. Cada vez son más los ciudadanos que optan por la bicicleta como medio de transporte cotidiano y los eventos relacionados con el mundo de la bici son ya habituales, buena muestra de ello son iniciativas como el reciente festival Ciclorama, especializado en ciclismo urbano, celebrado en el Palacio de Revillagigedo en el pasado julio, o la que cada año se organiza en el mes de abril, 30 días en bici, que promueve el uso diario de la bicicleta con un gran número de actos durante dicho mes como conciertos, charlas, paseos en bici, juegos o bicitapeos; por otro lado, ya han sido dos las exposiciones celebradas en el Centro de Cultura Antiguo Instituto bajo el título “La bici en Gijón”, que recorrieron la historia del uso de la bicicleta en nuestra ciudad desde finales del siglo XIX hasta nuestros días.
Desde la playa del Arbeyal hasta El Rinconín y desde Cimavilla a Nuevo Gijón, la ciudad está surcada por carriles bici que nos esperan. Este verano, ¡vive Gijón en bicicleta!
